Recordamos los 41 años del golpe de Estado en Chile diciendo que nuestros familiares fueron asesinados o desaparecidos porque ellos fueron parte en la construcción de una sociedad socialista junto al Presidente Salvador Allende.
Recordamos a quienes murieron y que fueron combatientes de la libertad porque lucharon para terminar con la dictadura, contra la cultura de la muerte, que se implementó en forma sistemática durante 17 años del gobierno cívico-militar.
Y esto lo decimos porque no debemos olvidar que detrás de los militares había civiles apoyando y financiando al gobierno de Pinochet y estaba EEUU detrás del golpe de Estado.
A 41 años nuestros familiares siguen vivos en nuestra memoria y en las banderas de lucha de los trabajadores, estudiantes y de las mujeres. Por eso recordamos sus vidas, no la muerte.
A 41 años debemos decir que no ha sido fácil la tarea de las agrupaciones de familiares. Han sido años de mucho trabajo, de búsqueda de la verdad y de la exigencia que haya justicia la que, sin embargo, ha sido muy mezquina con las víctimas y benevolente con los victimarios.
Sólo hemos tenido “justicia en la medida de lo posible”, como nos condenó el ex presidente Patricio Aylwin y durante estos casi 25 años de gobiernos democráticos. A 41 años debemos decir que todavía existen detenidos desaparecidos, personas que fueron torturadas y ejecutadas, y que aún no han sido encontrados sus cuerpos.
Actualmente, hay más de 1300 causas abiertas en la justicia para llegar a condenar a los culpables de los crímenes contra nuestros familiares. Debemos decir que solamente hay 177 militares y civiles condenados por crímenes de Lesa Humanidad, muchos de los cuales no han estado siquiera un día en la Cárcel ya que se mantiene vigente la ley de Amnistía a pesar que el Estado chileno ha sido condenado
por este hecho y debe abolir esta ley por ser injusta y porque viola el derecho humano más básico de que todos somos iguales ante la ley y merecemos justicia. A 41 años del golpe de Estado, homenajeamos a todos los hombres y mujeres que fueron asesinados, desaparecidos o torturados durante la dictadura militar. Por nuestro lado, seguiremos luchando, porque lamentablemente nos falta mucho todavía, para conocer toda la verdad y para alcanzar plena y total justicia.
Alicia Lira, Presidenta de AFEP, Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos